El delantero letón Maris Verpakovskis puso en jaque a la defensa de Alemania en la Eurocopa 2004
El 19 de junio de 2004, en el estadio de Bessa XII de Oporto, se disputó un encuentro crucial en la fase de grupos de la Eurocopa 2004. La selección de Letonia, liderada por el delantero Maris Verpakovskis, se enfrentó a la potente Alemania. Aunque el partido terminó con un empate 0-0, el conjunto letón logró sorprender a la defensa teutona en varias ocasiones.
El delantero letón, una amenaza constante
Verpakovskis, quien en su carrera jugó para equipos como el Getafe, el Celta y el Dínamo Kiev, entre otros, fue el protagonista del partido. Con sus habilidades y velocidad, logró dejar atrás a tres rivales en su carrera hacia el área de Oliver Kahn, aunque falló en la definición ante el guardameta alemán.
Además, el delantero letón reclamó dos penaltis y tuvo tres ocasiones claras de gol, recordadas aún hoy en día. Su actuación fue tan destacada que la defensa alemana tuvo que trabajar arduamente para controlarlo.
La estructura defensiva de Letonia, clave del empate
Más allá del destacado papel de Verpakovskis, la estructura defensiva de Letonia también fue clave en el empate. La selección báltica demostró un sólido espíritu defensivo y contención, lo que impidió que Fredie Bobic y Michael Ballack encontraran espacios durante todo el primer tiempo.
Alemania creció en el segundo período, pero su mejor oportunidad fue al borde del final, cuando Miroslav Klose malgastó su cabezazo libre de marca. La última jugada del partido, la última oportunidad. Uno de los 22 remates que propuso su equipo, nueve a portería, por los cinco de Letonia, tres sobre el marco de Kahn.
A pesar de la presión alemana, Letonia logró sumar su primer y único punto en la historia del campeonato. Un logro histórico para la selección báltica, que demostró su capacidad para competir contra los mejores.
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