Tres vidas unidas por una amistad que trasciende fronteras y barreras
En un mundo donde las diferencias culturales y las distancias geográficas pueden parecer insuperables, tres amigos han demostrado que la amistad puede ser una fuerza capaz de superar cualquier obstáculo. A pesar de provenir de orígenes dispares, estos tres individuos han tejido una relación que trasciende las fronteras nacionales y las barreras idiomáticas, demostrando que la conexión humana puede ser más fuerte que cualquier límite geográfico. En este emotivo relato, descubriremos la historia de estos tres amigos que han demostrado que la amistad verdadera puede conquistar incluso las distancias más grandes.
Tres vidas, una amistad: El poder del compromiso y la solidaridad
La historia de Alejandro Moreno, un leonés adoptado por Zamora, es un ejemplo paradigmático de la fuerza del compromiso y la solidaridad. Con 91 años, Alejandro es el voluntario más veterano de Castilla y León que trabaja con la oenegé Futudís, una organización que se enfoca en la tutela económica de personas con discapacidad intelectual.
Un vínculo especial
Alejandro se unió al programa Uno a uno de Futudís hace 30 años, y desde entonces ha sido amigo de Julián. Para Julián, yo soy su familia y él es la mía, porque no tiene ningún referente. Por eso, todos los sábados nos vemos y viene a casa. Yo me siento mejor tras estar con él, más realizado, afirma Alejandro.
El poder del compromiso
Alejandro destaca la importancia del compromiso en el trabajo con personas con discapacidad intelectual. Hay muchos que quieren probar a ser amigos de este colectivo, empiezan y lo dejan. Pero quien abandona no es porque se canse, porque de esto no te puedes cansar. Debe haber un compromiso. Yo siempre he dicho que me llevo más de Julián de lo que aporto.
La fundación Futudís
La fundación Futudís fue creada en 1990 por padres que tenían la preocupación de saber qué sucedería con sus hijos cuando ellos faltaran. Tenían una necesidad de que una organización tutelara sus recursos económicos sin ser juez y parte, explica María Jerez, responsable de Proyectos de Futudís.
El programa Uno a uno
El programa Uno a uno es clave en la labor de Futudís. Se creó para brindar apoyo a personas con discapacidad intelectual a través de voluntarios del exterior. Alejandro Pérez, de 29 años, es un ejemplo de esto. Conoció a Ernesto Peralta, de 37 años, y ahora son amigos y confidentes. Si te has visto en una situación difícil durante tu vida y te han apoyado, el deber moral es entregarlo a quien lo necesita, afirma Alejandro.
Otra historia de amistad
David Brezmes, de 25 años, conoció a Angelina Niño en 2019 a través de Futudís. Su relación de amistad les ha cambiado la vida. Me gusta mucho estar con él. Si tengo un problema, él lo nota y viene y me da un abrazo, una caricia, dice David.
La labor de Futudís
En 2023, Futudís contó con 123 personas voluntarias y apoyó a 543 personas con discapacidad intelectual. La organización tiene 33 trabajadores y se centra en la tutela económica de las personas con discapacidad intelectual.
La importancia de la compañía
La Fundación Futudís destaca la importancia de la compañía para las personas con discapacidad intelectual. El 15 por ciento sufre o ha sufrido abandono y el 56 por ciento, problemas familiares. Es más, el 16 por ciento no tiene familia. Y tan solo uno de cada cinco cuenta con una persona voluntaria a su lado.
El llamado a la acción
La labor de Futudís es fundamental para brindar apoyo a personas con discapacidad intelectual. Es importante que más personas se unan al programa Uno a uno y se conviertan en voluntarios para brindar compañía y apoyo a aquellos que lo necesitan. Como dice Alejandro, quien dice que no tiene tiempo para hacer el voluntariado, está poniendo una excusa.
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