Acusaciones de violencia institucional por parte de víctimas de abusos contra el Parlamento español por entrega de medalla de oro a la Abadía de Montserrat
Una polémica ha estallado en torno al Parlamento español tras la entrega de la medalla de oro a la Abadía de Montserrat, un reconocimiento que ha generado furia y indignación entre las víctimas de abusos que denuncian violencia institucional. El galardón, otorgado en reconocimiento a la labor de la Abadía en favor de la cultura y la sociedad, ha sido visto como un insulto a las víctimas de abusos que han denunciado la impunidad y la complicidad de la Iglesia Católica en España. Las víctimas y organizaciones de apoyo han lanzado acusaciones graves contra el Parlamento español, acusándolo de encubrir y proteger a los responsables de los abusos.
Víctimas de abusos acusan al Parlamento español de violencia institucional por medalla de oro a la Abadía de Montserrat
Miguel Hurtado y Enric Soler, víctimas de abusos sexuales por parte de la Iglesia, han denunciado que la concesión de la Medalla de Oro a la Abadía de Montserrat por parte del Parlamento español es un acto de violencia institucional y retraumatiza a las víctimas.
Enric Soler, víctima de abusos por un miembro de la Abadía de Montserrat, ha declarado que la institución ha sido la zona cero de la crisis de la pederastia clerical en el país. Soler ha exigido que la Mesa del Parlamento reconsidera esta decisión y ha anunciado que, si la cámara catalana no rectifica, protestarán con una cacerolada a las puertas del Parlamento el 10 de septiembre, día de entrega de las medallas.
Soler ha insistido en que la concesión de la medalla supone premiar conductas profundamente peligrosas para el bienestar de la infancia y envía el mensaje a las instituciones de que, si son poderosas y tienen buenos contactos políticos, pueden hacer lo que les dé la gana. Ha lamentado también que siempre se protege a la institución y se silencia a las víctimas, enviándoles el mensaje de yo no te creo.
Miguel Hurtado, another víctima de abusos, ha asegurado que nunca se había sentido tan violado por una institución como por la Mesa del Parlamento con esta decisión. Ha afirmado que hay muchas vidas destrozadas por esta lacra y ha asegurado que lo que pasaba en la iglesia lo sabía todo el mundo.
Los impulsores de la carta esperan, como mínimo, una respuesta por parte de la Mesa del Parlamento, a pesar de que Soler ha lamentado que quizás no llegue ni esto después de mostrar su decepción por el hecho de que este lunes, cuando se conoció que pedirían a la cámara rectificar, nadie los llamó para saber cómo estaban.
Tanto Hurtado como Soler han considerado que el Parlamento se ha cargado su credibilidad y han rechazado las palabras o los actos de homenaje a las víctimas de abusos sexuales si mantienen la medalla. En este sentido, Soler ha dicho que hay todavía una dictadura independentista, donde se mantiene el hermanamiento del poder eclesiástico y el público, silenciando las víctimas.
Por último, Soler ha lamentado que las víctimas molestan porque cuestionan el statu quo y ha añadido que el objetivo es borrarlas de la historia.
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