En un importante avance en el campo de la cardiología, el Hospital Universitario de Burgos (HUBU) ha ampliado sus capacidades para el diagnóstico y tratamiento de patologías cardíacas complejas gracias a la expansión del alcance del PET-TAC (Tomografía por Emisión de Positrones-Tomografía Computarizada). Esta tecnología de vanguardia permite a los médicos obtener imágenes detalladas del corazón y de los vasos sanguíneos, lo que facilita el diagnóstico y tratamiento de enfermedades cardíacas complejas. Con esta expansión, el HUBU refuerza su compromiso con la atención médica de alta calidad y se consolida como un centro de referencia en el diagnóstico y tratamiento de patologías cardíacas.
PETTAC: La tecnología puntera de diagnóstico en Medicina Nuclear del HUBU
El equipo más avanzado en detección precoz del cáncer, el PET-TAC, ha cumplido tres años en activo en Medicina Nuclear del HUBU. En este tiempo, ha ido aumentando progresivamente su uso, no solo para el diagnóstico de tumores y metástasis, sino también para otras aplicaciones como la localización de infecciones de difícil diagnóstico y evaluación cardiológica.
El HUBU extiende el alcance del PETTAC para el diagnóstico y tratamiento de patologías cardíacas complejas
Entre las nuevas indicaciones del PET-TAC se encuentra la evaluación de la viabilidad miocárdica de un paciente tras una isquemia o un infarto. Esto permite al cardiólogo determinar con precisión si el paciente tiene tejido recuperable y, de ser así, cuánto.
Para ello, ya se han seleccionado pacientes de la Unidad de Hemodinámica de Cardiología y se estima que se atenderán a entre 200 y 300 personas al año. Estos pacientes tendrán patología en el flujo cardíaco, como insuficiencia de flujo en esfuerzo, pero no en reposo (isquemia) o cuando la sangre no llega al corazón en ninguna de las dos situaciones (infarto).
PETTAC: La herramienta más avanzada para el diagnóstico y seguimiento de tumores y patologías complejas en el HUBU
La Tomografía por Emisión de Positrones (PET) es una prueba diagnóstica no invasiva que emplea material radioactivo en pequeñas cantidades para obtener imágenes que permiten evaluar las funciones de órganos y tejidos. Si se acompaña de un escáner (TAC), como es el caso del aparato del HUBU, obtiene imágenes más precisas del organismo.
El PET-TAC es considerada la mejor herramienta para el diagnóstico y seguimiento de tumores, pero también para un elenco de patologías cada vez más amplio. El HUBU fue el segundo hospital de Castilla y León en disponer de esta tecnología, después del hospital de Salamanca.
La ampliación de la red de PET-TAC en la región ha llevado a una disminución de derivaciones de pacientes a Burgos, pero no ha reducido la demanda en el HUBU. Al contrario, la demanda ha aumentado, lo que ha llevado a la necesidad de duplicar la plantilla facultativa y contratar a más especialistas.
El jefe de servicio, Juan José Duque, destaca que la excelente calidad del informe, la precisión de la imagen y el aumento de indicaciones han llevado a un aumento de la demanda. Se estima que el año terminará con 4.200 o 4.300 pacientes.
Para atender a este volumen de pacientes, la gerencia del HUBU y la Consejería de Sanidad han permitido que Medicina Nuclear duplique la plantilla facultativa, que ha pasado de tres a siete médicos. También se han aumentado los turnos de trabajo y se han habilitado tardes adicionales para atender a la demanda.
El equipo de Medicina Nuclear del HUBU cuenta con 8 enfermeros, 10 técnicos, cuatro secretarias, otros tantos celadores y el personal de limpieza. El jefe de servicio agradece a la dirección del HUBU y a la Consejería de Sanidad por su apoyo.
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