Jude Bellingham enfrenta partido de sanción por su comportamiento agresivo con Eslovaquia, pero evita la suspensión temporalmente
El joven mediocampista del Borussia Dortmund y de la selección inglesa, Jude Bellingham, se encuentra en el punto de mira de los árbitros y las autoridades futbolísticas después de su comportamiento agresivo en el partido contra Eslovaquia en la última jornada de la Liga de las Naciones. Aunque evita la suspensión temporalmente, el jugador de 19 años tendrá que pagar el precio de su actuación, ya que se le ha impuesto un partido de sanción que deberá cumplir en un futuro próximo.
Jude Bellingham logra evitar la suspensión temporalmente
El centrocampista de la selección inglesa, Jude Bellingham, ha sido multado con 30.000 euros y sancionado con un encuentro de suspensión, que queda pendiente de un período de prueba de un año, por sus gestos hacia el banquillo de Eslovaquia en la celebración de su gol en el duelo de los octavos de final de la Eurocopa 2024.
Según un comunicado publicado en la página web oficial de la UEFA, el Comité de Control, Ética y Disciplina de la UEFA ha decidido multar al jugador de la Asociación Inglesa de Fútbol con 30.000 euros y suspenderlo por un total de un partido de competición de la UEFA para el que de otro modo sería elegible por violar las reglas básicas de conducta decente.
La suspensión no se ejecutará de manera inmediata y estará sujeta a un período de prueba de un año, contado a partir de la fecha de la presente decisión. Esto significa que Bellingham podrá jugar este sábado en cuartos contra Suiza.
El polémico gesto de Bellingham se produjo después de su gol en el minuto 95, que forzó la prórroga e inició el triunfo final del conjunto inglés. En la celebración, el jugador del Real Madrid gesticuló de forma despectiva a la altura del banquillo eslovaco.
Tras el encuentro, Bellingham explicó en sus redes sociales que la celebración fue un gesto de broma interna hacia unos amigos cercanos que estaban en el partido. Agregó que no sentía más que respeto por cómo jugó el equipo de Eslovaquia esa noche.
Además, el Comité de Control, Ética y Disciplina de la UEFA decidió multar a la Asociación Inglesa de Fútbol con 11.000 euros; 10.000 por disturbios en el público y mil por encender fuegos artificiales por parte de sus aficionados.
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