La Ciudad Residencial Perlora, un complejo turístico abandonado en Asturias
En el concejo asturiano de Carreño, con vistas al mar Cantábrico, se encuentra la Ciudad Residencial Perlora, un complejo turístico que fue inaugurado en 1954 y que, sin embargo, actualmente se encuentra abandonado.
La tiktoker Claudia de los Toyos ha compartido un vídeo en la red social que muestra el estado ruinoso de lo que otrora fue un idílico lugar de vacaciones. Imagínate vivir en esta casa y tener esas vistas, ha dicho la joven, mostrando una panorámica del mar Cantábrico, visible desde algunas de las viviendas de este lugar.
Aunque sea un planazo de vida, todo esto está abandonado y no se puede vivir, ha comentado Claudia de los Toyos en su vídeo.
Un complejo turístico con historia
La Ciudad Residencial Perlora fue creada en pleno franquismo por la Obra Sindical de Educación y Descanso, y durante la década de los 60 y 70 vivió su momento de esplendor. El complejo estaba formado por 274 viviendas, en su mayoría casas de una o dos plantas y rodeadas de un entorno ajardinado.
Desconozco el motivo por el que no se puedan comprar estas casas, pero es una pena porque es todo muy bonito, ha valorado la tiktoker al hacer un recorrido en coche por el complejo.
Según explica en el vídeo, hay absolutamente todo tipo de instalaciones, esto era una miniciudad de vacaciones, indica Claudia de los Toyos mientras va mostrando algunos de los establecimientos abandonados, como tiendas de alimentación, o incluso una iglesia.
Es una pena la cantidad de casas que hay, ha expresado mientras ha comentado lo cerca que se sitúan de la playa. Me da tantísima pena que todas estas casas vayan a desaparecer, ha añadido.
Un estilo arquitectónico único
Desde el punto de vista arquitectónico, Perlora cuenta con un estilo único. Los chalés, de entre uno y tres dormitorios, fueron diseñados por los arquitectos del momento, como Julio Galán, Juan Manuel del Busto, Juan José Suárez Aller o Miguel Díaz Negrete.
Las viviendas estaban destinadas a las familias de los trabajadores de las empresas públicas de la minería y la siderurgia, que acudían a esta ciudad vacacional en turnos de dos semanas, y llegaron a albergar de forma simultánea a unas 1.500 personas.
Tras la dictadura, en 1982, el Estado cedió la gestión de Perlora al Principado de Asturias, que los administró hasta 2006, cuando el lugar se ha ido abandonando e incluso se llegó a derribar algún edificio. A pesar de los intentos por recuperar este complejo, todas las propuestas han caído en saco roto.
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