La situación económica de Navantia, la empresa líder en construcción naval de España, ha llegado a un punto crítico. La crisis financiera que afronta la empresa ha generado un clima de incertidumbre en la ciudad de Cádiz, donde se encuentran las instalaciones principales de la empresa. La decadencia de Navantia no solo afecta a la economía local, sino que también tiene un impacto significativo en la imagen de la ciudad, conocida por su rico patrimonio histórico y cultural. En este sentido, la crisis de Navantia se ha convertido en un símbolo de decadencia para Cádiz, una ciudad que ha visto cómo su principal motor económico se desmorona.
La Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) ha revelado que los astilleros públicos de Navantia ampliaron sus ingresos y plantilla en el pasado año. Según los datos, Navantia habría alcanzado en 2023 una cifra de negocio que rondaría los 1.400 millones de euros, una cantidad al alza pero que todavía está por debajo de las previsiones del Gobierno, que estimaba que sobrepasaría los 1.600 millones de euros.
Balance económico en números rojos
El balance económico de 2023 ya está bendecido por la SEPI y su resultado se publicará a final de este mes. Todo apunta a que los astilleros públicos repetirán pérdidas como en los últimos quince años, pero con la salvedad de que en 2023 sus números rojos podrían ser menores que en otros ejercicios. No obstante, el resultado final del ejercicio aún es una incógnita.
Confianza en cambiar la tendencia
Navantia confía en abandonar el resultado negativo en el ejercicio de 2024 y, a partir de entonces, inaugurar un nuevo ciclo económico en sus cuentas. El inicio en Ferrol de las obras de las fragatas F-110 para la Armada y la entrada en servicio del submarino S-80 han sido clave en las cuentas de 2023, mientras que en las de 2024 resulta importante la obra del patrullero de Marruecos en el astillero de San Fernando y el proyecto eólico de Ocean Winds que se desarrolla en Puerto Real, amén de la carga de trabajo que lideran las factorías de Fene y Cádiz en materia de reparaciones, entre otras actuaciones.
Cuentas de Navantia bajo la lupa
Las cuentas de Navantia han salido a la luz tras aprobar la SEPI el pasado junio los ejercicios de las empresas que forman parte de este holding público, entre ellas los astilleros de Navantia. Sin embargo, no ha trascendido todavía el dato de las posibles pérdidas cosechadas por la compañía en 2023.
SEPI aprueba cuentas anuales
El Consejo de Administración de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) aprobó las cuentas anuales correspondientes al ejercicio 2023, que arrojan para el Grupo SEPI un resultado de 10 millones de euros de beneficios. El holding público estatal logra beneficios por tercer año consecutivo con un resultado positivo que responde a la evolución de las distintas empresas participadas mayoritarias y a la contribución de las participadas minoritarias.
Inversiones y empleo
Las cuentas anuales del Grupo SEPI para el año 2023 reflejan una cifra de negocio récord, elevándose hasta los 5.908 millones, de los que el 36% corresponde al Grupo CORREOS, el 29% al Grupo TRAGSA y el 24% al Grupo Navantia. Respecto al ejercicio anterior, supone un aumento del 12,5%, motivado, fundamentalmente, por el incremento de la actividad de Navantia con un 6,86%, Grupo CORREOS con un 7,65%, Grupo ENUSA, un 8,22% y del Grupo TRAGSA con un 31,21%, entre otras. El Grupo ha realizado inversiones en 2023 por importe de 297 millones, un 36% superior al del ejercicio 2022. Las inversiones más significativas corresponden al Grupo Navantia y al Grupo Correos.
Empleo en alza
A cierre del ejercicio, el Grupo SEPI contaba con más de 85.000 trabajadores. Destacan la plantilla media del Grupo Correos con 50.220 empleados, la del Grupo TRAGSA con 23.164 y el Grupo Navantia con 4.742.
Historia de pérdidas
Cabe recordar que los astilleros españoles cerraron el ejercicio económico de 2022 con pérdidas. Navantia acabó el año con un déficit de 96,9 millones de euros, motivado especialmente por el incremento de costes de las materias primas. No obstante, fue un buen año de carga de trabajo para los astilleros. Con la publicación de los datos de 2022, Navantia encadenó quince ejercicios consecutivos en números rojos. Solo en 2007, el año de la refundación de la antigua Izar a Navantia, logró 159.000 euros de beneficio.
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