- La justicia pide una condena de más de 30 años de prisión para el acusado de asesinato y lesiones graves por rociar con gasolina a sus vecinos y prenderles fuego en Barcelona
- Peticiones de condena: más de 30 años de prisión para acusado de asesinato y lesiones graves en Barcelona
- Delitos imputados
- Secuelas de las víctimas
- Defensa del acusado
- Declaración del acusado
- Refutación de la versión del acusado
La justicia pide una condena de más de 30 años de prisión para el acusado de asesinato y lesiones graves por rociar con gasolina a sus vecinos y prenderles fuego en Barcelona
En un caso de violencia extrema, la justicia española solicita una condena de más de 30 años de prisión para el acusado de asesinato y lesiones graves cometidos contra sus vecinos en Barcelona. Según los hechos, el acusado roció con gasolina a sus víctimas y posteriormente les prendió fuego, causando daños irreparables y pérdida de vidas humanas. La Fiscalía considera que la gravedad de los delitos cometidos justifica una pena severa, y espera que la justicia sea impartida de manera efectiva. El caso ha conmocionado a la opinión pública y ha generado un gran debate sobre la seguridad ciudadana en la capital catalana.
Peticiones de condena: más de 30 años de prisión para acusado de asesinato y lesiones graves en Barcelona
En el juicio celebrado en la Audiencia de Barcelona, la acusación particular, ejercida por la abogada Mónica Aguilar, ha solicitado más de 30 años de prisión para el acusado de rociar con gasolina y prender fuego a su casero y a la pareja de éste el 20 de diciembre de 2020 en su piso de Barcelona.
Además de la pena de prisión, la letrada ha pedido una indemnización de 130.000 euros por los daños causados a ambos.
Delitos imputados
La acusación particular ha pedido la condena por dos delitos de intento de asesinato, o subsidiariamente homicidio en grado de tentativa, así como por los delitos de lesiones y amenazas.
Por su parte, la Fiscalía ha mantenido la petición de 25 años de prisión por dos presuntos delitos de intento de homicidio, delitos de lesiones y amenazas.
Secuelas de las víctimas
En la segunda y última sesión del juicio, los doctores que atendieron a las víctimas han explicado ante el tribunal que las secuelas de las quemaduras son graves, ya que generan, si hay supervivencia, cuadros de sepsis e infecciones muy importantes que pueden llevar a la muerte.
Además de los daños psicológicos, el casero del acusado sufrió lesiones por las que tiene que llevar un traje para proteger las zonas afectadas, mientras que su pareja tuvo que ser intervenida quirúrgicamente para recuperar la movilidad del mentón.
Defensa del acusado
La defensa del acusado ha solicitado la absolución del procesado, o una eximente incompleta por legítima defensa, al entender que el ataque lo inició la otra parte.
La defensa ha pedido al tribunal que lo deje en libertad tras casi dos años en prisión provisional, una petición a la que tanto la Fiscalía como la acusación particular se han opuesto rotundamente.
Declaración del acusado
El acusado ha reiterado que estaba en su casa cuando bajaron sus vecinos con un bidón de gasolina con ánimo de atacarlo a él y a su sobrina y que, al intentar quitárselo para tirarlo por la ventana, el líquido inflamable se desparramó por el suelo a causa del forcejeo y explotó.
Los que tienen que pedir disculpas son sus clientes, que vinieron a agredirme a mi casa y tiraron la puerta abajo, ha expresado en alusión a la acusación particular.
Refutación de la versión del acusado
La letrada ha refutado esta versión al recordar la declaración de los Mossos d’Esquadra, que comparecieron en calidad de testigos, y que explicaron que el fuego no se inició al entrar en contacto la gasolina con un generador, como explicaron inicialmente las víctimas.
Se ha intentado distraer al tribunal con hechos periféricos, pero el ánimo del acusado era acabar con la vida de mis representados, ha concluido, alegando que el fuego lo originó el procesado de forma intencionada utilizando un mechero.
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