En el marco de una vida llena de logros y reconocimientos, la figura de Marian Robinson, madre de la ex primera dama de Estados Unidos, Michelle Obama, emerge como una fuente de inspiración y apoyo en momentos críticos. La memoria de Marian Robinson es un tributo a la figura maternal que supo estar siempre presente en momentos de necesidad, brindando apoyo y consejo a su hija en momentos clave de su vida. A través de su historia, descubriremos cómo la determinación y el amor de una madre pueden ser el motor que impulsa a una persona a alcanzar grandes logros.
La Madre de Michelle Obama, una figura maternal que inspiró a su hija en momentos de necesidad
Marian Robinson, madre de la ex primera dama estadounidense Michelle Obama, falleció este viernes a los 86 años, según confirmó la propia familia a través de las redes sociales.
En un comunicado, su familia dijo que Robinson había muerto en paz el viernes por la mañana. La familia Obama expresó su tristeza por la pérdida de una figura maternal que inspiró a Michelle Obama en momentos de necesidad.
Una vida dedicada a la familia
Marian Robinson fue un personaje muy conocido en la Casa Blanca durante los ocho años de la administración de Barack Obama entre 2009 y 2017. Pasó gran parte de ese tiempo cuidando a sus dos nietas, Malia y Sasha, hijas de Michelle y Barack Obama.
En una declaración publicada en la red social X, la señora Obama llamó a su madre su roca, siempre ahí para lo que necesitaba. Ella fue el mismo apoyo constante para toda nuestra familia, y estamos desconsolados al compartir que falleció hoy, escribió.
Un legado de amor y apoyo
El propio Barack Obama dijo que hubo y habrá solo una Marian Robinson. En nuestra tristeza, nos alegra el extraordinario regalo de su vida. Y pasaremos el resto de nuestro tiempo tratando de estar a la altura de su ejemplo, agregó.
Marian Robinson nació en 1937 y vivió toda su vida en Chicago, antes de aceptar trasladarse a Washington DC después de la victoria electoral de su yerno, Barack Obama.
Recuerdos de una vida en la Casa Blanca
En un comunicado, la familia contó algunas anécdotas de la vida de Marian Robinson en la Casa Blanca. En lugar de codearse con los ganadores del Oscar o del Nobel, prefería pasar el tiempo arriba con una bandeja frente a la televisión, en la habitación fuera de su dormitorio con grandes ventanales que daban al Monumento a Washington. El único invitado al que ella pidió reunirse fue el papa, explicaron.
La familia Obama recordó a Marian Robinson como una figura maternal que siempre estuvo ahí para apoyar a su familia en momentos de necesidad. Su legado de amor y apoyo seguirá inspirando a futuras generaciones.
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