La comunidad ambiental se encuentra conmocionada ante la noticia de la tala ilegal de árboles en el parque del Parral, un espacio verde emblemático de la ciudad. Ante esta situación, la Policía Científica de la Guardia Civil (Seprona) ha decidido intervenir y investigar a fondo este caso para determinar las responsabilidades y evitar que este tipo de acciones perjudiquen aún más el medio ambiente. La protección del patrimonio natural es un deber ciudadano y la justicia ambiental debe ser ejercida en casos como este, que ponen en riesgo la biodiversidad y el equilibrio ecológico.
La Policía Científica de la Guardia Civil investiga la tala ilegal de árboles en el parque del Parral
La preocupación generada por la tala de decenas de árboles en el parque del Parral ha llevado al Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) a intervenir en el lugar para investigar los trabajos realizados.
La investigación se centra en determinar si se ha cometido un delito ambiental y si es necesario instruir diligencias o tramitar una denuncia administrativa. Un equipo de la Seprona se personó en el entorno del parque después de recibir un aviso sobre la situación.
Según fuentes del Instituto Armado, el equipo de la Seprona analizará los hechos para determinar si se ha producido un daño ambiental y si se han incumplido las normas de protección del medio ambiente.
Por su parte, desde Patrimonio Nacional defienden que la obra se realiza de común acuerdo con los técnicos que el Ayuntamiento ha designado para la coordinación de esta actuación. Sin embargo, el equipo de Gobierno ha expresado su crítica a la tala de árboles.
Según informes, en la reunión mantenida el pasado 24 de mayo entre técnicos municipales y de Patrimonio Nacional, de la UTE adjudicataria y de la dirección de obra, se revisaron todos los árboles a talar y se determinó que la tala era necesaria debido a un informe técnico externo que ponía de manifiesto el riesgo que presentaban estos árboles.
Los técnicos de Patrimonio Nacional señalaron que solo aceptarían dejarles en pie si el Ayuntamiento ponía su oposición por escrito y asumía la responsabilidad, pero no fue así. Únicamente se consensuó dejar para otro momento la poda y la tala de dos árboles.
La investigación de la Seprona busca determinar si se han violado las normas de protección del medio ambiente y si se han cometido delitos ambientales.
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