Telcos vuelven a reajustar precios con 'low cost' en pleno año de recorte laboral
En un contexto económico caracterizado por la incertidumbre y la inestabilidad, las operadoras de telecomunicaciones (telcos) han decidido tomar medidas para ajustar sus estrategias y mantenerse competitivas en el mercado. A pesar de que este año se ha caracterizado por los recortes laborales en el sector, las empresas de telecomunicaciones han optado por implementar un nuevo modelo de negocio basado en la oferta de productos low cost, lo que supone un reajuste en los precios de sus servicios. Esta decisión tiene como objetivo atraer a más clientes y aumentar la cuota de mercado en un entorno cada vez más competitivo.
Telcos reajustan precios en pleno año de recortes laborales
El mercado de telecomunicaciones se encuentra en una situación de alta competencia, con las operadoras de telecomunicaciones luchando por mantener sus clientes y atraer a nuevos. En este contexto, el segmento de bajo costo sigue calentando, con precios que se desploman cada vez más.
La barrera de los 20 euros
La barrera de los 20 euros por un paquete convergente de fibra y móvil ya se ha pulverizado. La empresa rumana Digi fue la primera en romper esta barrera, ofreciendo una tarifa exclusivamente en las áreas donde cuenta con fibra propia. Ahora, otros operadores como Finetwork y Vodafone también han reducido sus precios a niveles similares.
Digi, que ya ejerce de cuarto operador después de la creación de Masorange con la fusión de Orange y Másmóvil, sigue defendiendo que no hay planes de incrementar sus precios. Sin embargo, la presión para tratar de acercarse a los niveles de precio de Digi sigue incrementándose.
La batalla comercial
La batalla comercial se mantiene en un año en el que se resucitan los recortes laborales en el sector. Varios operadores, como Vodafone, Avatel y Telefónica, han anunciado planes de reducción de personal para ajustar costos y competir en este mercado más agresivo.
Vodafone ha propuesto la salida de hasta 1.200 trabajadores, un 36% de la plantilla, mientras que Avatel ha cerrado un acuerdo sindical para el despido de 674 empleados, lo que supone el 35% de su plantilla. Telefónica también pactó la salida de 3.400 trabajadores de las tres principales filiales.
El riesgo de canibalización
La batalla comercial también trae consigo el riesgo de canibalización de los clientes desde las grandes marcas, más centradas en un producto de más alto valor. Sin embargo, los operadores de telecomunicaciones siguen necesitando crecer y mantener su cuota de mercado.
Finetwork y otros operadores móviles virtuales (OMV) como Avatel buscan apretar el acelerador y ganar terreno en el mercado. Vodafone, con sus nuevos dueños, el fondo de inversión Zegona, busca ser más competitivo y dar más protagonismo a su segunda marca, Lowi.
La dificultad para ajustar las cuentas
La conectividad de bajo costo tiene unos márgenes de beneficio muy estrechos. Y el alto endeudamiento de la mayoría de estos principales actores, incluido el caso de Digi, obliga a afinar.
Digi sigue manteniendo tasas de crecimiento del 24% en los ingresos durante los primeros meses de este año, pero también ha tenido una contrapartida. Entre enero y noviembre de 2023, registró unas pérdidas netas contables de más de 18 millones.
En este contexto, la batalla comercial se mantiene en un año en el que se resucitan los recortes laborales en el sector. Los operadores de telecomunicaciones siguen necesitando crecer y mantener su cuota de mercado, pero también deben ajustar sus cuentas y reducir costos para competir en este mercado más agresivo.
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