En una noche que será recordada por mucho tiempo, Novak Djokovic escribió un nuevo capítulo en su legendaria carrera, logrando una remontada épica en el torneo de Roland Garros. El serbio, actual número uno del mundo, demostró una vez más su condición de campeón, derrotando al italiano Lorenzo Musetti en un partido que se prolongó hasta la madrugada. Con esta victoria, Djokovic no solo se aseguró un lugar en la siguiente ronda del torneo, sino que también revivió la leyenda de su carrera, demostrando que sigue siendo el rey del tenis mundial.
Novak Djokovic revive la leyenda en París: derrota a Musetti en un partido épico y despierta la madrugada en Roland Garros
La experiencia y la épica se unieron en la raqueta de Novak Djokovic para tumbar a Lorenzo Musetti con una remontada espectacular (7-5, 6-7(6), 2-6, 6-3, 6-0), en un partido que terminó pasadas las tres de la madrugada, para citarse con Cerundolo en la cuarta ronda de Roland Garros.
'Nole' aguantó el tipo y lo dio todo ante el recital de un Musetti que tuvo todas las cartas en su juego. El italiano disfrutó de un saque contundente, una derecha letal y un revés a una mano que levantó en más de una ocasión a la Philippe Chatrier para quedarse a un set de eliminar al favorito en París.
El número uno lo pasó mal y sufrió desde que se le escapó el segundo set, tras haber firmado un gran arranque pese a ceder un break, que luego recuperó, algo más consistente y eficaz gracias a un punto glorioso para poner el 7-5. 'Nole' se dejó todo ahí, casi literalmente, porque las fuerzas le fallaron después.
El serbio se puso 4-1 arriba, pero la exigencia que le planteó Musetti terminó haciendo mella dando la vuelta al parcial hasta forzar la muerte súbita. Ahí, con la tensión al máximo, Djokovic tuvo bola para ponerse dos sets a cero, pero el italiano aseguró una noche larga en París, con el número uno muy comprometido.
El defensor del título flaqueó ante un rival muy entonado que aprovechó su momento para endosar un 2-6 en el tercero y poner a tiro la campanada. Sin embargo, Djokovic, en su cruzada de leyenda, tenía otros planes y apretó los dientes para seguir vivo en París.
Con el partido encaminado a horas intempestivas, el serbio sacó su mejor versión para forzar al máximo a Musetti. El italiano, que encontró algo de sensaciones en el Challenger de Turín antes de Roland Garros en medio de una mala temporada, vio cerca otra victoria sobre su prestigioso rival tras la de Montecarlo el año pasado, pero en cuanto dio respiro con su saque, Djokovic se le coló con el 'break' en el quinto juego y otro más en el séptimo.
El revés de Musetti aún quiso algo más de fiesta, pero el serbio respondió con otro punto de mayor calibre si cabe para ganarse a la Philippe Chatrier y empezar sacando el quinto set. El campeón de 24 'grandes' estaba ya en su salsa, crecido en medio de un partido que no olvidará y que sentenció sin miramientos en un rotundo 6-0 para citarse con Cerúndolo en la próxima ronda de la Copa de los Mosqueteros.
Una remontada épica para el número uno del mundo
La remontada de Djokovic es más que un partido de tenis, es una lección de vida. La experiencia y la garra del serbio se unieron para tumbar a un rival que parecía tener todas las cartas en su juego.
El partido será recordado durante mucho tiempo en el mundo del tenis, y es que la remontada de Djokovic es más que un simple partido, es una demostración de la capacidad del número uno del mundo para sobreponerse a la adversidad y salir adelante en momentos clave.
El serbio demostró una vez más por qué es considerado uno de los mejores tenistas de la historia, y su remontada épica ante Musetti es solo otro ejemplo de su capacidad para sobreponerse a cualquier obstáculo.
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