En un dramático incidente durante una conferencia de prensa en Washington, un grupo de activistas palestinos interrumpió la rueda de prensa del secretario de Estado de los Estados Unidos, Antony Blinken, con gritos y gestos simbólicos que conmocionaron a los presentes. Los manifestantes, vestidos de negro y con las manos manchadas de pintura roja que simbolizaba la sangre derramada en la lucha palestina, denunciaron lo que consideran un crimen de guerra cometido por las fuerzas israelíes en contra del pueblo palestino. La protesta sorprendió a los asistentes y generó un momento de tensión en la sala de prensa.
Activistas palestinos interrumpen conferencia de Blinken con gritos y gestos de protesta contra la invasión israelí en Gaza
Un grupo de activistas propalestinos interrumpió varias veces a gritos la comparecencia del secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, en dos comités del Senado, en protesta por el apoyo estadounidense a la ofensiva israelí sobre Gaza.
Los manifestantes se sentaron entre el público de la audiencia, detrás de Blinken, y algunos de ellos le gritaron criminal de guerra y carnicero cuando el secretario de Estado tomaba la palabra, tras lo cual fueron desalojados por la seguridad del Capitolio.
Otros activistas, en cambio, optaron por permanecer en silencio y levantar sus manos manchadas con pintura roja que simulaba sangre, dado que si estaban callados la policía les permitía quedarse en la audiencia.
Estas interrupciones y abucheos en actos de miembros del Gobierno, incluidos discursos del propio presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se han vuelto habituales a medida que avanza la invasión israelí sobre la Franja de Gaza.
Un grupo de manifestantes propalestinos acampó durante varias semanas frente a la residencia de Blinken a las afueras de Washington. Las protestas se extendieron también por universidades de todo el país, donde se instalaron campamentos que en muchos casos fueron desmantelados por la policía.
El Partido Demócrata celebrará en agosto en Chicago su convención para nombrar a Biden como candidato a la reelección y algunos temen que se repitan las escenas de la Convención Nacional de 1968, que se celebró en la misma ciudad y que estuvo marcada por las protestas contra la guerra de Vietnam.
Las protestas pacíficas también se han extendido a través de redes sociales, donde se han compartido imágenes de manifestantes sosteniendo carteles que dicen libros, no bombas y comida, no F-35, en referencia a la venta de armas estadounidenses a Israel.
La situación es tensa y los activistas no parecen dispuestos a cesar en sus protestas hasta que Estados Unidos cambie su política hacia la región.
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