EDF adquiere el negocio de turbinas para centrales nucleares de General Electric
En un movimiento estratégico que busca reforzar su presencia en el mercado de la energía nuclear, EDF, el grupo energético francés, ha anunciado la adquisición del negocio de turbinas para centrales nucleares de General Electric, una de las empresas más grandes y destacadas del sector. Esta operación permitirá a EDF ampliar su oferta de servicios y soluciones para la industria nuclear, consolidando su posición como líder en el mercado. La adquisición también permitirá a la empresa francesa acceder a tecnologías y competencias clave para impulsar su crecimiento en el mercado de la energía nuclear.
EDF adquiere el negocio de turbinas nucleares de General Electric
La empresa eléctrica estatal francesa, EDF, ha comprado oficialmente las actividades nucleares de General Electric, acuerdo que incluye la fabricación y el mantenimiento de las turbinas Arabelle para centrales atómicas.
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, anunció esta operación en una entrevista publicada en los periódicos del grupo Ebra, destacando que EDF se queda con las actividades nucleares de General Electric y en especial las actividades de mantenimiento y de fabricación de las turbinas Arabelle.
Según Macron, esta operación va a permitirnos recuperar la producción de las turbinas y se podrá rentabilizar porque produciremos para nosotros y para los demás.
No se ha revelado el importe de la compra, aunque Macron aseguró que se han dado garantías para la cesión de las licencias estadounidenses necesarias para la operación.
La adquisición por parte de la eléctrica estatal francesa ya había sido anunciada por el jefe del Estado en febrero de 2022, cuando las dos empresas suscribieron un acuerdo de exclusividad como marco de las discusiones. Sin embargo, el proceso se ha prolongado más de lo esperado.
Un negocio estratégico
El negocio que ahora ha adquirido EDF pertenecía hasta 2015 al grupo francés Alstom, cuando fue cedido a GE en medio de una gran polémica en la que Macron (entonces ministro de Economía) fue acusado de haber autorizado que un activo industrial estratégico se lo quedara un grupo extranjero.
En Belfort, en el noreste de Francia, se fabrican las turbinas Arabelle que equipan las centrales nucleares francesas de nueva generación EPR, como la que va a entrar en servicio este verano en Flamanville, en la costa de Normandía, y las que se están construyendo para el Reino Unido.
Según Macron, estas turbinas serán fundamentales para los seis reactores atómicos que Francia construirá y empezará a explotar entre 2035 y 2050, además de las que pueda seguir exportando.
Una de las razones detrás de esta adquisición era el riesgo de que General Electric se negara a continuar las entregas teniendo en cuenta que el principal cliente de GE Steam Power es Rosatom debido a las sanciones estadounidenses a Rusia.
Con esta compra, EDF consolida su posición en el mercado nuclear y asegura el suministro de turbinas para sus centrales atómicas.
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