En un escenario energético en constante evolución, el autoconsumo energético se perfila como una de las claves para alcanzar una mayor sostenibilidad y eficiencia energética. Con el objetivo de fomentar el desarrollo de este sector, se han diseñado nuevas ayudas más selectivas que se centran en el apoyo a tecnologías innovadoras y soluciones de vanguardia. Estas iniciativas buscan impulsar la transición energética y reducir la dependencia de los combustibles fósiles, contribuyendo a un futuro más limpio y sostenible. A continuación, exploraremos los detalles de estas nuevas ayudas y su impacto en el futuro del autoconsumo energético.
El futuro del autoconsumo energético: menos ayudas generales y más enfocadas en tecnologías innovadoras
El Ministerio de Transición Ecológica apunta a ayudas más selectivas y enfocadas en tecnologías innovadoras, marcando un cambio en la política de ayudas para el autoconsumo energético.
Una nueva era para el autoconsumo energético
El 31 de diciembre del año pasado se cerró un episodio histórico en la historia de las subvenciones públicas para el autoconsumo energético. Durante los dos años anteriores, se repartieron 2.000 millones de euros en ayudas directas para la instalación de autoconsumo fotovoltaico. Sin embargo, según el Ministerio de Transición Ecológica, no habrá otro programa de ayudas tan masivo y general como el anterior.
Carlos Montoya, director del Departamento de Solar del Instituto para la Diversificación y el Ahorro de Energía (IDAE), ha reconocido que otra línea como esta no creo que haya. El IDAE no está trabajando en nuevos programas de ayudas, pero las que pueda haber en el futuro serán muy distintas a las de los dos últimos años, ya que serán mucho menos cuantiosas y muy dirigidas a tecnologías o acciones concretas que interese impulsar.
Un futuro más selectivo
Según Montoya, las futuras líneas de ayudas se dirigirán probablemente a cosas singulares, como promocionar la economía circular o apoyar a ciertos colectivos, como el autoconsumo también se inserta entre las políticas del Gobierno contra la pobreza energética. Los criterios de reparto dejarán de ser los kilovatios de potencia instalada y el Gobierno no se plantea cambiar las ayudas directas masivas por incentivos fiscales.
Un cambio en el sector del autoconsumo
El sector del autoconsumo se pone la meta de instalar placas solares en cinco millones de chalets y arrancar en los bloques de viviendas. Sin embargo, el origen de las ayudas al autoconsumo está en el Fondo de Recuperación de la UE tras la pandemia de Covid-19, y su éxito tuvo que ver con la crisis energética que se desencadenó en Europa después de la invasión rusa de Ucrania.
Borja Pellicer, CEO de Bet Solar, ha afirmado que el mejor marketing de este sector lo ha hecho Putin, desgraciadamente. Ahora que los precios de la electricidad han vuelto a la normalidad, el autoconsumo entra en una nueva fase, en la que distribuidores e instaladores reclaman al Gobierno incentivos para que hogares e industrias sigan apostando por las placas solares.
Retrasos en la llegada de las ayudas
Los retrasos en la llegada de las ayudas son un tema clave en la actualidad. Según APPA Renovables, medio año después de que dejaran de darse, las resoluciones no llegan ni a la mitad del presupuesto total de 2.000 millones. En todo caso, el IDAE y las comunidades autónomas se enfocan en terminar con el reparto efectivo de las subvenciones europeas.
El futuro del autoconsumo energético entra en una nueva fase, con ayudas más selectivas y enfocadas en tecnologías innovadoras. El Ministerio de Transición Ecológica apunta a un cambio en la política de ayudas, y el sector del autoconsumo se prepara para una nueva era.
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