El meloncillo podrá ser cazado en Cádiz si se comprueban daños en las fincas o cotos.

La reciente noticia sobre El meloncillo podrá ser cazado en Cádiz si se comprueban daños en las fincas o cotos ha generado controversia en la región. Esta decisión, que permite la caza de meloncillos en determinadas circunstancias, ha despertado preocupación entre los defensores de la fauna silvestre. La autorización de cazar a estos animales, protegidos por su estatus de especie cinegética, solo se llevará a cabo si se comprueban daños en las fincas o cotos, lo que plantea interrogantes sobre la gestión de la convivencia entre la conservación de la biodiversidad y los intereses agrícolas en la zona. Es crucial que se realicen evaluaciones exhaustivas para garantizar un equilibrio sostenible en la relación entre el ser humano y el medio ambiente.

Autorizan caza de meloncillo en Cádiz ante daños a fincas y cotos

El Meloncillo es uno de los grandes depredadores de la provincia de Cádiz y la parte suroeste de España. Es pequeño en sus medidas (entre 50 y 65 centímetros), pero tremendamente voraz con especies como conejos, perdices, codornices, reptiles e incluso corderos y gallinas. Por ello, ganaderos, agricultores y cazadores se pusieron en pie de guerra solicitando a las administraciones que permitieran su caza.

Tal y como adelanta ABC, «el meloncillo podrá cazarse en las fincas y cotos de Andalucía que acrediten daños», una medida a la que se ha comprometido el consejero de la Junta, Ramón Fernández-Pacheco.

En concreto, se creará un nuevo procedimiento para que las personas afectadas puedan solicitar la autorización excepcional para el control de daños ocasionados por el meloncillo utilizando el modelo de solicitud recogido en el Anexo III del Decreto 23/2012, de 14 de febrero. Además, deberán aportar pruebas gráficas que acrediten dichos daños.

El meloncillo es un animal muy escurridizo, difícil de ver, pero residente tanto en la zona de la Sierra de Cádiz como en diferentes puntos del Campo de Gibraltar. Este carnívoro, también denominado mangosta africana, «sufre una fuerte explosión demográfica que está afectando al declive de la caza menor», como señalan desde la Federación Andaluza de Caza (FAC).

Lo consideran una especie invasora que hasta ahora no se podía cazar. Hace solo dos meses la Junta de Extremadura tomaba la determinación y se convertía en la primera autonomía en permitir la caza del depredador alóctono. «Este herpéstido se ha expandido considerablemente en las últimas décadas, ocupando todo el territorio sin control alguno, causando estragos en la fauna salvaje y atacando también al ganado doméstico».

Aún así, el meloncillo no pasará a considerarse cinegética, como quieren ganaderos y cazadores, si no que se seguirá considerando una especie protegida pero se permitirá su control con carácter excepcional.