El Parador en mitad de un paisaje lunar con las mejores vistas del Teide:
En una ubicación única, el Parador Nacional de Las Cañadas del Teide se erige como un verdadero tesoro natural en medio de un paisaje lunar. Situado a los pies del majestuoso volcán Teide, esta joya arquitectónica ofrece a sus visitantes una experiencia inolvidable en plena naturaleza salvaje. Con vistas panorámicas impresionantes y un entorno que parece sacado de otro planeta, este enclave se convierte en un refugio de paz y tranquilidad. Los huéspedes pueden disfrutar de amaneceres y atardeceres mágicos que pintan el cielo de colores inimaginables, mientras se deleitan con la exquisita gastronomía local y se sumergen en la cultura e historia de la isla. Sin duda, un lugar que invita a la contemplación y al asombro, donde la belleza natural se fusiona con el confort y la elegancia.
Parador de Las Cañadas del Teide: Un oasis de lujo con vistas privilegiadas al Teide
En el corazón de la isla de Tenerife, se alza imponente el volcán del Teide, la cumbre más alta de España. Con sus 3.715 metros sobre el nivel del mar, nos regala una postal única, con conos volcánicos y las coladas de lava de curiosos colores y formas, y una gran riqueza biológica con especies endémicas.
En medio de ese bonito paisaje lunar, se encuentra un hotel igual de llamativo: el Parador de Las Cañadas del Teide. Este alojamiento nos da la oportunidad de dormir frente a la imponente montaña, disfrutando de un entorno único y las mejores vistas del volcán.
Descubre el Parador de Las Cañadas del Teide: Un refugio sostenible en pleno paisaje volcánico
El Parador de Las Cañadas del Teide se encuentra plantado enfrente del inmenso volcán tinerfeño, a nada más y nada menos que 2.000 metros de altitud. Se trata de una casona de montaña rodeada de naturaleza salvaje, con salón con chimenea, jardín, piscina cubierta, sauna, gimnasio y parking exterior. Se suman unas panorámicas impresionantes del Teide y la Montaña de Guajara, que se pueden disfrutar incluso desde algunas de sus habitaciones.
Cabe destacar que el hotel supone un ejemplo de sostenibilidad, ya que este genera su propia electricidad y el agua la obtiene de la montaña. Además, al encontrarse en una zona sin contaminación lumínica, cuando cae la noche, las vistas del cielo estrellado son simplemente sobrecogedoras.
Un factor esencial en el Parador de Las Cañadas del Teide es la gastronomía, y es que cuenta con un restaurante donde deleitarnos con la cocina regional, local y del entorno. Aquí podremos probar platos tradicionales como el conejo al salmorejo, las papas arrugadas con mojos, el puchero canario, el queso asado, el gofio, el guiso de cabra al estilo de las cumbres y el cherne.
Y por supuesto, la experiencia se completa explorando el Parque Nacional del Teide. Es imperdible subir al teleférico, que nos lleva desde la estación base (a 2.356 metros de altitud) a la estación superior (a 3.555 metros). Desde este punto podemos seguir un sendero que nos lleva hasta el cráter a pie; se tardan unos 40 minutos y la dificultad es alta.
Cómo llegar al Parador de Las Cañadas del Teide: el trayecto en coche desde la ciudad de Santa Cruz de Tenerife hasta el Parador de Cañadas del Teide es de aproximadamente 1 hora y 25 minutos por la TF-24.
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