En un esfuerzo por garantizar la seguridad vial y proteger la integridad de los ciudadanos, la autoridad irlandesa ha tomado una medida drástica en cuanto al uso de patinetas eléctricas en el país. A partir de ahora, se prohíbe el uso de estos vehículos a menores de 16 años, en un intento por prevenir accidentes y lesiones graves. Además, se ha establecido un límite de velocidad de 20 km/h para todos los usuarios de patinetas eléctricas, independientemente de su edad. Esta medida busca reducir el riesgo de accidentes y garantizar un entorno más seguro para peatones y conductores.
La autoridad irlandesa regula el uso de patinetes eléctricos con medidas de seguridad imperantes
Desde este lunes, Irlanda ha prohibido el uso de patinetes eléctricos a menores de 16 años y ha establecido medidas de seguridad para regular su uso y prevenir accidentes.
Entre las medidas implementadas se encuentra la limitación de velocidad máxima a 20 kilómetros por hora y la prohibición de circular por vías peatonales. Además, se exige que los patinetes eléctricos tengan un peso máximo de 25 kilogramos y que estén equipados con elementos de seguridad como luces y reflectores delanteros y traseros, frenos y timbres.
Según datos de la Garda, la Policía irlandesa, en 2022 se registró un promedio de 14 accidentes o colisiones cada semana, lo que ha llevado a la autoridad a tomar medidas drásticas para evitar nuevos incidentes. El año pasado, se contabilizaron más de 220 accidentes, de los cuales 54 provocaron heridas graves o mortales.
Entre las características obligatorias para los patinetes eléctricos se encuentran ruedas con un diámetro mínimo de 200 milímetros y la prohibición de transportar a más de una persona al mismo tiempo. También se prohíbe instalar sillas en ellos.
La velocidad, un factor clave
Sam Waide, consejero delegado de la Autoridad de Seguridad Vial, ha destacado que circular a 20 kilómetros por hora en un patinete, que es bastante menos estable que una bicicleta, es, de hecho, bastante rápido.
Waide ha subrayado que las reglas están ahora claras para todo el mundo y ha instado a los usuarios a revisar las características de sus patinetes para garantizar que cumplen con la nueva normativa.
La nueva regulación tiene como objetivo reducir el número de accidentes y garantizar la seguridad de los usuarios de patinetes eléctricos y de los demás usuarios de la vía pública.
Irlanda se suma así a la lista de países que regulan el uso de patinetes eléctricos con el fin de prevenir accidentes y garantizar la seguridad en las vías públicas.
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