La ciudad de Rafah se encuentra al borde del colapso. La comunidad internacional ha fallado en su deber de proteger a la población civil, permitiendo que el asedio continúe sin fin. Como resultado, la ciudad se enfrenta a una grave crisis humanitaria, con una escasez total de alimentos y combustible. Los residentes, desesperados y desesperanzados, llevan cinco días consecutivos sin acceso a los esenciales básicos, como alimentos, agua y medicinas. La situación es crítica y exige una respuesta urgente por parte de la comunidad internacional para evitar una catástrofe humanitaria.
Crisis humanitaria en Rafah: escasez de alimentos y combustible lleva a la desesperación
La situación en Rafah, territorio del sur de la franja de Gaza colindante con Egipto, es cada vez más crítica. El cierre del paso a Egipto decretado por las autoridades israelíes el lunes 6 de mayo ha llevado a una escasez de alimentos y combustible que está llevando a la desesperación a la población.
La falta de combustible abocaría también al cierre casi inmediato de 17 centros sanitarios de la organización de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA) y de 10 clínicas móviles. Además, la falta de alimentos es acuciante, y el Programa Mundial de Alimentos se quedará sin nada que distribuir en el sur de la Franja el sábado a menos que reciba más ayuda.
Gaza en el borde del desastre: UNICEF advierte de la posible interrupción de servicios médicos
La situación es especialmente crítica en los hospitales, donde la falta de combustible puede obligar a suspender las operaciones. El Coordinador Superior de Emergencias de UNICEF en la Franja de Gaza, Hamish Young, advirtió de que en cuestión de 48 horas, la maternidad de una instalación como el Hospital Emiratí, donde nacen unos 80 bebés al día, dejará de funcionar si no se restablece el flujo de ayuda humanitaria.
La evacuación de la población de Rafah ordenada por las fuerzas israelíes ha provocado ya el éxodo de unas 110.000 personas, lo que está produciendo un éxodo desordenado que expone a los desplazados a enfermedades, infecciones y malnutrición.
El secretario general de la ONU, António Guterres, alertó de que la invasión terrestre por Rafah podría provocar un desastre humanitario épico. Un ataque terrestre masivo en Rafah provocaría un desastre humanitario épico y acabaría con nuestros esfuerzos por ayudar a la población ante la inminente hambruna, declaró Guterres.
La situación es tan crítica que los expertos de la ONU han recordado que Al-Mawasi, adonde se ha ordenado ir a los evacuados, carece ya de alimentos, agua, medicinas, productos de higiene, electricidad, refugio o acceso a la educación.
La comunidad internacional ha sido llamada a detener esta desastrosa campaña mediante el corte del suministro de armas a Israel, la retirada de las inversiones y el apoyo político.
Deja una respuesta