En el actual escenario inmobiliario español, una gran incertidumbre se cierne sobre el futuro de la vivienda pública. La parálisis en la que se encuentra la Ley del Suelo está impidiendo la puesta en marcha de nuevos proyectos de viviendas públicas, lo que a su vez está dificultando el control del alza de los precios en el mercado inmobiliario. Esta situación está generando gran preocupación entre los expertos y los sectores más vulnerables de la sociedad, que ven cómo se les escapan las oportunidades de acceso a una vivienda digna. La inacción legislativa está teniendo consecuencias graves en la disponibilidad de viviendas asequibles y en la estabilidad del mercado, lo que puede tener un impacto negativo en la economía y la sociedad en su conjunto.
Parálisis de la Ley del Suelo: un revés para la vivienda pública y el control de precios
El pasado 23 de mayo, el Gobierno retiró el proyecto de reforma de la Ley de Suelo y Rehabilitación Urbana, apenas una hora antes de su debate y votación en pleno del Congreso de los Diputados, debido a la falta de apoyos parlamentarios suficientes para sacarlo adelante.
Esta decisión supone un revés para los planes del Gobierno de poner en el mercado más vivienda pública a precios asequibles en un momento de especial tensión por los problemas de acceso, especialmente para los colectivos más vulnerables.
La falta de Ley del Suelo agrava el déficit de vivienda pública y el alza de los precios inmobiliarios
La norma iba a permitir desbloquear planes urbanísticos en un contexto en el que se necesitan 600.000 viviendas de aquí al año que viene para hacer frente a los desajustes entre oferta y demanda, según los últimos cálculos del Banco de España.
Tras retirarla, la ministra de Vivienda y Agenda Urbana, Isabel Rodríguez, anunció que pondría la modificación de la Ley del Suelo a disposición de los grupos políticos para sacar adelante la norma tras las elecciones europeas, que se celebran el próximo 9 de junio.
El desequilibrio entre oferta y demanda seguirá presionando al alza los precios que ya alcanzaron de media su nivel más elevado desde 2009 a cierre del primer trimestre. Los pisos se encarecieron un 4,3% hasta marzo en relación con el mismo período de hace un año, y el metro cuadrado se paga de media a 1.865,8 euros, según los datos publicados esta semana por el Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana.
La industria inmobiliaria pide soluciones urgentes
En un encuentro con periodistas celebrado el viernes, el consejero delegado de la promotora Aedas Homes, David Martínez, descartó que los precios vayan a bajar en el corto plazo e insistió en la necesidad de liberar suelo en España.
Beatriz Toribio, secretaria general de la Asociación de Promotores Constructores de España (APCEspaña), coincide en que es necesario que la nueva Ley del Suelo salga adelante para desarrollar un parque de vivienda pública y asequible tanto de alquiler como de compra. Nos preocupa que esté en riesgo una ley tan importante y necesaria, lamenta.
Un problema que requiere soluciones transversales
El diagnóstico y las propuestas para atajar este problema por parte de expertos y organismos nacionales e internacionales parecen ir, en líneas generales, por la misma vía. Hacen falta políticas de vivienda con una visión más a largo plazo, de forma que la regulación favorezca la oferta y la colaboración público-privada.
El problema de acceso es generalizado, pero es más evidente en lo que tiene que ver con los precios y con la oferta en las grandes ciudades. No solo porque las grandes urbes concentran la actividad económica, sino también buena parte de la actividad turística, lo que repercute en las compraventas de extranjeros.
El Consejo Económico y Social (órgano asesor del Gobierno que aglutina a los agentes sociales y otros representantes de la sociedad civil) alerta en su Memoria Anual de 2023 que, si no se ataja, el acceso a la vivienda puede llegar a estrangular el crecimiento económico y el empleo.
Deja una respuesta