La semana pasada fue un verdadero golpe para el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y su partido, el PSOE. La celebración del 9J, la jornada de reflexión previa a la celebración del referéndum de Cataluña, y la falta de negociación con los socios parlamentarios revelaron la debilidad de la mayoría del PSOE. La falta de apoyo de los partidos que hasta ahora habían sostenido al Gobierno dejará a Sánchez en una situación muy delicada, obligándolo a reevaluar sus estrategias y a buscar nuevos aliados para mantenerse en el poder.
La debilidad de la mayoría: el PSOE se enfrenta a la realidad de sus aliados
La situación política en España se ha complicado para el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y su partido, el PSOE. La cercanía de las elecciones europeas del 9 de junio y la falta de negociación con sus socios parlamentarios han llevado a dos reveses parlamentarios importantes en la Cámara Baja esta semana.
El PSOE presentó dos iniciativas en el Congreso: una proposición de ley sobre proxenetismo y una reforma de la ley del suelo. Sin embargo, prácticamente todos los socios del PSOE, incluido Sumar, rechazaron estas iniciativas, lo que llevó a la derrota de la ley sobre proxenetismo y la retirada del proyecto de ley para evitar un segundo batacazo.
El PP, que evitó desvelar el sentido de su voto, derribó la proposición de ley sobre proxenetismo y se disponía a hacer lo propio con la reforma de la ley del suelo cuando el Gobierno la retiró. Esto permitió al PP infligir una dura derrota al PSOE a las puertas de la campaña europea y evidenciar la debilidad de la alianza parlamentaria del presidente Pedro Sánchez.
El PSOE culpa al PP y a Sumar de su doble derrota en el Congreso, pero admite la inestabilidad en el período electoral. Sin embargo, los socios del PSOE, como EH Bildu, Sumar, ERC y PNV, han dejado claro que quieren seguir apoyando al Gobierno siempre y cuando el PSOE negocie con ellos las iniciativas antes de llevarlas al Congreso para ser aprobadas.
Oskar Matute, portavoz adjunto de EH Bildu en el Congreso, pidió a Sánchez cuidar esta mayoría tan diversa y plural y interlocutar con sus socios para llegar a acuerdos sólidos que beneficien a la gente. Íñigo Errejón, portavoz de Sumar en el Congreso, advirtió que el PSOE no puede sacar políticas de pelotazo y que es necesario retomar la iniciativa ante el avance reaccionario.
Gabriel Rufián, portavoz de ERC, tachó de dramático que el PSOE no sea capaz de negociar leyes y aseguró que hay un camino a recorrer pese a que los socialistas no quieran hacerlo. Aitor Esteban, portavoz del PNV en el Congreso, descartó que el Gobierno esté perdiendo la mayoría parlamentaria que lo sustenta.
La portavoz de Junts, Míriam Nogueras, fue más agresiva en su crítica al Gobierno, recordando que Sánchez no tiene mayoría ni en Madrid ni en Cataluña para sacar adelante sus medidas sin negociarlas con sus socios. Sin embargo, también dejó claro que no se cerró a seguir negociando su apoyo a las iniciativas del Ejecutivo.
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