La sequedad vaginal es un problema de salud que afecta a un gran número de mujeres, siendo una de las condiciones más comunes que se presentan en la consulta ginecológica. De acuerdo a estadísticas, aproximadamente un tercio de las mujeres experimentan algún tipo de sequedad vaginal a lo largo de sus vidas. Esta condición no solo puede afectar la salud sexual y emocional de las mujeres, sino que también puede influir en su bienestar general. Sin embargo, es importante destacar que la sequedad vaginal no es un problema irreversible, ya que existen tratamientos efectivos que pueden ayudar a aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida de las mujeres que la padecen.
La sequedad vaginal y la menopausia: una relación íntima
La sequedad vaginal es un síntoma común durante la menopausia. De hecho, según la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO), es muy frecuente en las mujeres que han sido diagnosticadas con el síndrome genitourinario en la menopausia. Un estudio realizado por Domma en España reveló que hasta un 30% de las mujeres la padecen antes de la menopausia, y cuando esta llega, el porcentaje aumenta a un 55%.
¿Por qué aumenta la sequedad vaginal con la llegada de la menopausia?
La caída de los estrógenos y de otras hormonas sexuales son la clave para que la sequedad vaginal aparezca durante la menopausia. Esto afecta tanto a la vagina como a los genitales, uretra y vejiga. La SEGO explica que la sequedad vaginal es uno de los síntomas más molestos que sufren las mujeres durante la menopausia, junto con otros síntomas como irritación, prurito, dolor, escozor y descamación.
El impacto en la calidad de vida
La sequedad vaginal no solo es molesta, sino que también afecta la calidad de vida de las mujeres. La doctora Ana Pascual, especialista en Ginecología y Obstetricia, explica que estas disfunciones pueden tener consecuencias importantes tanto físicas como psicológicas, con efectos negativos en la relación de pareja y en la calidad de vida en general.
Los problemas para mantener relaciones sexuales satisfactorias y sin dolor pueden acabar provocando discusiones y malestar entre la pareja, así como una gran sensación de insatisfacción. La irritación, picor y dolor también pueden afectar el estado de ánimo, generando irritabilidad y enfados que afectan las relaciones.
Ignorar el problema empeora la situación
La doctora Ana Pascual destaca que a menudo muchas de estas disfunciones de la zona íntima femenina se ignoran y no se tratan porque se consideran una consecuencia inevitable de procesos fisiológicos como el parto o la menopausia. Esto provoca que el malestar se prolongue en el tiempo.
Tratamiento de la sequedad vaginal
El tratamiento de la sequedad vaginal debe ser individualizado. Un estudio reciente publicado en la revista FMC - Formación Médica Continuada en Atención Primaria compartió como opciones para mejorar la sequedad vaginal la terapia con estrógenos locales a dosis bajas, la prasterona y el uso de láser ginecológico.
Es importante destacar que la detección precoz es clave para que este síntoma no tenga un impacto negativo en la vida de las mujeres que lo sufren.
Fuente: Bonet, R., & Garrote, A. (2010). Sequedad vaginal: casos prácticos. Farmacia profesional, 24(5), 60-64. Vallejo, J. L. G. (2024). Sequedad vaginal. FMC-Formación Médica Continuada en Atención Primaria, 31(2), 101-109.
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