La igualdad de acceso a los procesos democráticos es un derecho fundamental que debe ser garantizado para todos los ciudadanos. Sin embargo, un informe reciente ha revelado que más de 800.000 personas con discapacidad no pudieron ejercer su derecho a votar en las elecciones al Parlamento Europeo en 2019. La principal razón de esta exclusión es la presencia de barreras arquitectónicas y de acceso a los centros de votación, que impidieron a estas personas con discapacidad ejercer su derecho al voto. Esta situación es inaceptable en una sociedad que se declara democrática y justa. Es fundamental abordar esta problemática para garantizar la igualdad de oportunidades y el acceso universal a los procesos democráticos.
La lucha por el voto: más de 800.000 personas con discapacidad excluidas de las elecciones Europeas en 2019
Una reciente investigación de la Agencia de Derechos Fundamentales de la Unión Europea, titulada Participación política de las personas con discapacidad. Nuevos desarrollos, revela que más de 800.000 ciudadanos no pudieron votar en las elecciones al Parlamento Europeo de 2019 debido a su discapacidad.
Según el informe, una de cada cuatro personas en la Unión Europea tiene una discapacidad. Aunque algunos países de la UE han facilitado el voto de las personas con discapacidad en las elecciones, algunos grupos todavía enfrentan barreras considerables cuando se trata de votar y presentarse a las elecciones.
Desafíos actuales en la Unión Europea
Entre los desafíos actuales a los que se enfrenta la UE se encuentran las restricciones legales existentes en algunos países. Las leyes de siete países (Bulgaria, Chipre, Estonia, Malta, Polonia, Portugal y Rumania) todavía excluyen automáticamente del voto a las personas bajo tutela legal.
Por otro lado, varios países han eliminado las restricciones al voto basadas en la capacidad jurídica, en particular para las personas con discapacidad intelectual y psicosocial.
Accesibilidad en los colegios electorales
Existen problemas de accesibilidad especialmente en los colegios electorales para facilitar el voto de las personas. Los ciudadanos con discapacidad visual, auditiva o intelectual todavía enfrentan barreras considerables, como la falta de dispositivos de votación táctiles, información en braille, audio o formatos de fácil lectura.
Sensibilización sobre los derechos
En cuanto a la sensibilización sobre los derechos, 17 países de la Unión Europea cuentan ahora con estrategias sobre discapacidad que abordan específicamente la participación política. Sin embargo, a menudo falta una consulta sistemática y significativa con las organizaciones de personas con discapacidad, destacan los autores del informe.
Participación política y barreras administrativas
Respecto a la participación política, en algunos países aún persisten barreras administrativas para obtener información, registrarse para votar y obtener apoyo durante las elecciones.
Buenas prácticas
Por otro lado, el informe también identifica buenas prácticas tales como campañas accesibles o proporcionar transporte exclusivo para facilitar la votación.
Esperamos que esta información sea de utilidad para promover la inclusión y la participación política de las personas con discapacidad en la Unión Europea.
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