Ante la reciente controversia que ha rodeado a Rubén Rivera, quien ha sido apartado de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), el implicado ha salido al paso de las acusaciones con firmeza. En declaraciones públicas, Rivera ha afirmado que la verdad saldrá a la luz y ha negado categóricamente haber coaccionado a Jenni Hermoso, jugadora de la selección femenina de fútbol. Estas acusaciones han generado un profundo debate en el ámbito deportivo y han puesto en entredicho la integridad del hasta ahora dirigente. La transparencia y la investigación imparcial serán clave para esclarecer este caso que ha conmocionado al mundo del fútbol español.
Rubén Rivera se defiende de acusaciones: La verdad saldrá a la luz
La Real Federación Española de Fútbol, en una decisión tomada el pasado miércoles 27 de marzo, ha optado por suspender cautelarmente a Rubén Rivera, exdirector de marketing de la RFEF, y Albert Luque, figura de confianza de Luis Rubiales y exdirector de fútbol de la selección española. Esto, tras la petición de la Fiscalía a la Audiencia Nacional de un año y seis meses de prisión para ambos por supuestas coacciones a Jenni Hermoso.
Rubén Rivera, en una intervención en el programa El Larguero, ha manifestado su postura ante los acontecimientos: Nunca la he coaccionado. No tenía motivos para hacerlo. Estoy inmerso en una batalla que no me concierne. La verdad saldrá a la luz y todo esto será un mal sueño dentro de unos meses, aseguró en la Cadena SER.
Escándalo en la RFEF: Apartan a Rivera por supuestas coacciones a Jenni Hermoso
Además, Rivera abordó su estado emocional tras ser apartado de la RFEF: Estoy triste y sorprendido, es una situación injusta. Desde el inicio, ha habido filtraciones que me han dañado públicamente. Aun así, estoy tranquilo porque soy inocente. El exresponsable de marketing negó cualquier intento de coacción durante el polémico viaje a Ibiza, donde se realizó una recepción oficial con políticos y atención personalizada a jugadoras y acompañantes.
La FIFA y la UEFA han mostrado preocupación por el escándalo en la RFEF, consultando a Rocha acerca de una asamblea y un nuevo presidente. Rivera concluyó: Lo que cuento está probado por testigos y jugadoras. Nadie me ha acusado de coacción. Esta supuesta coacción falsa parece haber salido a la luz mucho después. Es una situación que no comprendo.
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