La reina del pop, Taylor Swift, ha vuelto a sorprender a sus fans con un espectacular concierto en el que no solo destacó por sus impresionantes voces, sino también por sus accesorios luminosos. La artista estadounidense se presentó en el escenario con un par de pulseras LED que dejaron a todos con la boca abierta. Pero, ¿qué hay detrás de estos brillantes accesorios? ¿Son solo un detalle de moda o esconden un secreto tecnológico más allá de la estética? En las siguientes líneas, descubriremos el misterio detrás de las pulseras LED que han generado tanto revuelo en la red.
Taylor Swift deslumbra en concierto con sus impresionantes pulseras LED: ¿qué secreto hay detrás de estos accesorios brillantes?
La cantante estadounidense Taylor Swift es un fenómeno de masas que no puede negarse. Sus conciertos se han convertido en todo un espectáculo que todo el mundo quiere vivir, y parte del motivo es el gran despliegue tecnológico que pone en marcha la cantante.
Claramente, las expectativas de los asistentes han cambiado. Ya no basta con escuchar a sus artistas favoritos en un escenario. Los fans demandan experiencias más inmersivas, personalizadas y memorables.
La tecnología detrás de las pulseras LED
En el caso de Taylor Swift, que se encuentra inmersa en su gira de conciertos The Eras Tour y que actuará en Madrid este miércoles y este jueves, más de 140.000 personas podrán disfrutar de una experiencia aún más memorable gracias a una curiosa pulsera LED capaz de sincronizarse con la música y crear figuras.
Estas pulseras LED que reciben los asistentes antes del concierto pueden sincronizarse con la música del escenario y crear figuras como corazones o una serpiente gigante moviéndose por las gradas.
Estas pulseras incorporan una tecnología de radiofrecuencia o infrarrojos que permiten una coordinación precisa de las luces entre todas las pulseras en el público, creando un efecto envolvente.
Cómo funcionan las pulseras LED
Tal y como explican desde la consultora Entelgy, normalmente, estas pulseras se programan de forma individual antes del evento para que cada una cuente con un código personal y poder activarla en un momento específico.
Pero en este caso, para crear las formas, sería necesario saber dónde va a estar colocada cada pulsera y que su propietario no se mueva. Para sortear este problema, se utilizan sensores distribuidos por el estadio —similares a las cámaras— que observan toda la escena, localizando cada una de las pulseras y mandándoles órdenes a través de láseres de red infrarroja invisibles con la forma que quieren recrear.
Otras tecnologías presentes en los conciertos de Taylor Swift
Los brazaletes de luz no son la única tecnología que la artista implementa en sus conciertos. Es habitual que utilice sistemas de sonido sin cableado para poder actuar ante condiciones meteorológicas adversas sin que afecte al sonido.
Estos aparatos están testados bajo requisitos militares: caídas, calor y frío extremo, sudor humano, humedad y sal, entre otras condiciones.
La cantante pudo poner a prueba esta tecnología en su concierto en Boston en mayo del año pasado, en el que la actuación fue acompañada de un gran aguacero.
Además, los efectos visuales también fascinan al público, por ejemplo, cuando el suelo del escenario parece romperse con cada paso. Esto se consigue gracias a una escenografía monumental que se extiende a lo largo de 100 metros, con tres escenarios principales autónomos conectados por una larga pasarela.
Esta estructura, combinada con una pantalla panorámica curva de alta definición, crea un espectáculo visualmente impactante.
La tecnología detrás de las pulseras LED es de la empresa PixMob, que ha trabajado con artistas como Coldplay, Lady Gaga y muchos otros conciertos de K-Pop.
Las pulseras suelen tener unas 7 horas de autonomía.
La analítica avanzada de datos que generan las pulseras pueden utilizarse para promociones de productos y servicios, fidelización de marcas o análisis del tipo de audiencia.
Deja una respuesta