Arlanzón realizará reparaciones nuevamente en sus piscinas para prevenir fugas.
La localidad de Arlanzón se encuentra en alerta ante la aparición de fugas en sus piscinas municipales. Ante esta situación, las autoridades locales han decidido tomar medidas inmediatas y llevar a cabo reparaciones exhaustivas en las instalaciones acuáticas. Esta no es la primera vez que Arlanzón enfrenta problemas de este tipo, por lo que es crucial actuar con prontitud para evitar daños mayores y garantizar la seguridad de los ciudadanos. Las piscinas son un importante punto de encuentro y recreación para la comunidad, por lo que su correcto funcionamiento es primordial. Estas acciones buscan no solo solucionar las fugas existentes, sino también prevenir que vuelvan a ocurrir en el futuro.
El Ayuntamiento de Arlanzón invierte casi 100.000 euros en reparar sus piscinas para evitar fugas
En solo dos meses, julio y agosto del año pasado, una deficiencia en la ejecución del rebosadero de las piscinas de Arlanzón, inauguradas en el año 2018, provocó la fuga de 4 millones de litros de agua, además del gasto a mayores en electricidad, ya que las válvulas estaban continuamente funcionando e inyectando cloro para poder mantener los niveles adecuados.
Para solventar este problema, y otros defectos de base en su construcción y que hacen que la instalación no cumpla la normativa, el Ayuntamiento de la localidad ha sacado a licitación una obra de reparación integral por un importe total de 99.696 euros.
La alcaldesa de Arlanzón, Marta Santamaría, ha calificado la cantidad de agua perdida como un escándalo, así como el coste adicional en electricidad y producto desinfectante. La salida y entrada de agua ininterrumpida provocaba que siempre estuviera fría, ya que al no permanecer en el vaso era imposible que se pudiera llegar a calentar, situación que se daba en los dos vasos, el de adultos y el infantil.
La actual corporación municipal detectó estos problemas al llegar al Ayuntamiento y decidió tratar de ponerles solución. La alcaldesa destaca la importancia de cuidar y mantener un bien patrimonial como las piscinas de Arlanzón.
El objetivo del proyecto es realizar las obras pertinentes para modificar el diseño del rebosadero y adaptarlo a la normativa, a la vez que solventar el actual problema de fugas tanto en la piscina de adultos como en la piscina infantil. La solución proyectada se basa en el picado y reconstrucción del borde de las piscinas con la reparación y sustitución completa del rebosadero.
Las empresas interesadas en ejecutar la obra tienen de límite hasta el 16 de mayo para presentar sus ofertas. Después, disponen de un plazo máximo de dos meses para ejecutarlas. La alcaldesa confía en que las instalaciones puedan abrir entre finales de junio y principios de julio.
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