Gema Mariscal, la tenista que juega al blind tennis con pasión
La madrileña Gema Mariscal, de 48 años, ha encontrado en el blind tennis una nueva pasión y desafío en su vida. Después de perder la visión debido a un accidente, Gema se sumergió en el mundo paralímpico, donde encontró su lugar en el judo, llegando a ser subcampeona de Europa y del mundo, y campeona de España.
El blind tennis, un deporte que requiere habilidad y concentración
El blind tennis es un deporte que se juega con una pelota especial que tiene un núcleo interno sonoro, lo que permite a los jugadores escuchar la dirección y velocidad de la pelota. Lo llamamos blind tennis y no tenis para ciegos, es su nombre más internacional, explica Gema. La clave del juego es la comunicación entre los jugadores, que se gritan entre sí ready, yes y play para sincronizar sus movimientos.
Las categorías del blind tennis
En el blind tennis hay cuatro categorías, B1, B2, B3 y B4, según el nivel de visión de los jugadores. Gema juega en la categoría B2, que engloba a los tenistas que ven poco. En el ojo izquierdo no veo absolutamente nada y en el derecho menos de 0,5, cuenta.
El desafío de Gema en el blind tennis
A pesar de las dificultades, Gema se ha convertido en una figura importante en el blind tennis español. Es subcampeona en su categoría B2 de la Comunidad de Madrid, y lucha por que el blind tennis sea reconocido como deporte oficial en España.
El entrenamiento y la competencia
Gema entrena dos veces a la semana con un entrenador particular y los domingos con el equipo de blind tennis de Madrid en el Club Avantage. La pelota especial es cara y difícil de obtener, y los jugadores deben unirse para hacer pedidos en Japón.
La vida diaria de Gema
Gema tuvo que dejar su trabajo después de su segundo trasplante de córnea y ahora se dedica full-time al tenis. Su familia y amigos la apoyan en los partidos, y le dicen cosas como más arriba o más abajo para ayudarla a ubicarse en la pista.
El futuro del blind tennis
Gema lucha por que el blind tennis sea reconocido como deporte oficial en España, y espera que en un futuro cercano se pueda organizar un torneo de España. No hay campeones catalanes, gallegos o valencianos, cuenta, por eso tampoco se puede hacer todavía un torneo de España.
Con determinación y pasión, Gema Mariscal sigue adelante en su camino por hacer del blind tennis un deporte reconocido y respetado en España.
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