En un nuevo giro de los acontecimientos en torno a la causa de Tsunami, dos independentistas más han sido imputados por terrorismo y han tomado la decisión de escapar a Suiza para eludir a la justicia. Esta noticia ha generado conmoción en la opinión pública, pues pone de manifiesto la complejidad y la gravedad de las acusaciones que recaen sobre estos individuos. La fuga de los imputados plantea interrogantes sobre la efectividad de los mecanismos de control y vigilancia en el ámbito judicial, así como sobre la colaboración internacional en la lucha contra el terrorismo. Las autoridades competentes se encuentran en alerta máxima para dar con el paradero de los fugitivos y garantizar que respondan ante la ley por los delitos que se les imputan.
Dos independentistas vinculados al Tsunami Democràtic se exilian en Suiza para evitar la justicia
La causa del Tsunami Democràtic ha sumado dos nuevos fugados que han decidido instalarse en Suiza para evitar enfrentar la justicia española. El periodista de La Directa, Jesús Rodríguez, y el escritor y empresario, Josep Campmajó, han anunciado esta decisión tras ser vinculados al Tsunami Democràtic por el juez que investiga el caso en la Audiencia Nacional, Manuel García Castellón.
Periodista y escritor se suman a los fugados de la causa del Tsunami Democràtic
La fuga de Rodríguez y Campmajó se ha conocido después de que el dirigente de Òmnium, Oleguer Serra, revelara que también se encuentra exiliado en Suiza desde hace casi seis meses. Además, el diputado y número 9 de la lista de ERC en el 12-M, Ruben Wagensberg, también se encuentra en Suiza. Esta acción preventiva contra el periodismo ha generado gran preocupación en el ámbito periodístico.
Rodríguez ha explicado que su decisión se debe a que la cúpula del poder judicial español hace de partido político y pretende instrumentalizar un procedimiento penal para boicotear la tramitación de la Ley de Amnistía. El periodista ha denunciado que se le acusa injustamente de tener información previa de las manifestaciones de otoño de 2019, simplemente por hacer su trabajo.
Por su parte, Campmajó ha afirmado que su decisión se debe al seguimiento policial y al temor a una posible detención y encarcelamiento. Ha destacado que la situación llegó a tal punto que sentía la presión de la policía vigilándole en cada momento, generando un ambiente de miedo y persecución.
Ambos fugados han negado cualquier papel de liderazgo en el Tsunami Democràtic y han expresado su preocupación por la manera en que se está llevando a cabo la investigación, acusándolos de terrorismo junto a otras personalidades políticas catalanas.
El juez García-Castellón ha reclamado a los investigados que proporcionen sus direcciones para citarles a declarar, entre ellos Rodríguez, Campmajó y Oleguer Serra. La situación de los involucrados en esta causa sigue generando controversia y preocupación en el ámbito político y periodístico.
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