En una acción sin precedentes, funcionarios penitenciarios han decidido bloquear los accesos a las cárceles de Brians mediante la utilización de barricadas y hogueras de neumáticos. Esta medida extrema, llevada a cabo como forma de protesta, ha generado una situación de caos y tensión en las instalaciones penitenciarias. La decisión de bloquear los accesos ha sido tomada como respuesta a las condiciones laborales y salariales precarias a las que se enfrentan los trabajadores penitenciarios.
Funcionarios de cárceles de Brians bloquean accesos con barricadas y hogueras
Decenas de funcionarios de las prisiones de Brians 1 y 2, ubicadas en Barcelona, han llevado a cabo una contundente acción de protesta durante la jornada de hoy. En un acto sin precedentes, han bloqueado los accesos a ambos centros penitenciarios mediante la colocación de barricadas y la quema de hogueras de neumáticos.
La manifestación, que inició alrededor de las siete de la mañana, ha generado importantes complicaciones en el ingreso del personal a las instalaciones, según han informado fuentes cercanas a los concentrados a la agencia EFE. Ante esta situación, se ha desplegado un destacado número de efectivos de los Mossos d'Esquadra para mantener el orden público en la zona.
Las protestas de los trabajadores penitenciarios surgieron como respuesta al trágico suceso ocurrido el pasado día 13 en la prisión de Mas d'Enric de Tarragona, donde una cocinera perdió la vida a manos de un interno que posteriormente se suicidó. Este lamentable incidente ha desencadenado una profunda indignación en el colectivo, que exige justicia y seguridad en su entorno laboral.
Los funcionarios han expresado su descontento con los acuerdos alcanzados entre los sindicatos y la consellería de Justicia catalana tras las primeras movilizaciones. Consideran que dichos acuerdos se han gestado sin tener en cuenta las demandas de la plantilla, la cual exigía, como requisito previo a cualquier negociación, la dimisión de la consellera de Justicia, Gemma Ubasart, y del secretario general de Medidas Penales, Amand Calderó.
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