En un operativo policial de gran envergadura, se ha desarticulado un grupo criminal dedicado al fraude alimentario en las localidades de Leganés y Seseña. La organización delictiva logró estafar la impresionante suma de 17 millones de euros mediante la comercialización de jamones con sellos sanitarios falsos. Este golpe a la ilegalidad alimentaria ha sido posible gracias a la labor conjunta de las autoridades, que han logrado desmantelar una red fraudulenta de gran magnitud. La utilización de prácticas engañosas y documentación falsa evidencia la complejidad y la gravedad de este delito, que pone en riesgo la salud y la confianza de los consumidores. Este acontecimiento pone de manifiesto la importancia de la vigilancia y el control en el sector alimentario para garantizar la integridad y la seguridad de los productos que llegan a nuestra mesa.
Desmantelan grupo criminal en Leganés y Seseña por estafa de millones con jamones falsificados
La Policía Nacional ha desarticulado un grupo criminal que ha estafado presuntamente 17 millones de euros exportando jamones bajo sellos sanitarios falsificados. La investigación comenzó en agosto del pasado año, tras conocer que una empresa cárnica con naves en Leganés y Seseña podría estar utilizando un sello sanitario falso para comerciar con sus jamones.
La empresa se encargaban de despiezar los jamones, estamparles un sello falso como distintivo de calidad y tratamiento sanitario y distribuirlos a sus clientes, según ha informado el Ministerio del Interior. Las autoridades han concluido que la empresa titular del sello, un matadero de Aranjuez, era desconocedora de la actividad ilícita que se llevaba desarrollando durante cinco años.
Con la colaboración de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, se planificó una inspección en ambas sedes y tras los registros llevados a cabo, se pudo localizar el falso sello en la nave ubicada en la localidad de Leganés.
Seis detenciones y seis palés destruidos
La operación se ha saldado con la detención de seis trabajadores de la empresa cárnica que ocupaban diferentes roles de responsabilidad dentro de la empresa. Se les atribuyen delitos de pertenencia a grupo criminal, estafa y falsificación documental, por lo que han pasado a disposición judicial.
Por otro lado, la Autoridad Sanitaria procedió a la inmovilización y destrucción de diez palés de jamones almacenados en las cámaras frigoríficas de ambas sedes ya que contaban con irregularidades en los protocolos de conservación alimentaria.
En la operación también han colaborado las Conserjerías de Sanidad de Madrid y Toledo.
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