En un sorprendente y inusual fenómeno que llama la atención en todo el mundo, un país asiático ha adoptado una extraña costumbre para garantizar la seguridad de sus peatones. En este lugar, los peatones han tomado la iniciativa de cruzar las calles con un ladrillo en la mano, como una forma de pedir atención a los conductores. Esta práctica, aunque puede parecer inusual, busca concienciar a los conductores sobre la importancia de prestar atención a los peatones en las calles. ¿Cuál es el país detrás de esta insólita costumbre y qué ha llevado a sus ciudadanos a adoptar esta única forma de autoprotección?
Vancouver, Canadá: la ciudad que utiliza ladrillos para promover la seguridad de los peatones
En España, los peatones tienen prioridad en los pasos de cebra, según estipulado en las reglas de circulación. Sin embargo, a veces los conductores se olvidan de esta norma, lo que puede generar situaciones peligrosas para los transeúntes.
En la actualidad, existen dos tipos de pasos de peatones: los que tienen semáforo, donde hay menos problemas para cruzar la calzada, y los que no tienen señales, donde el peligro aumenta considerablemente dependiendo de la zona.
¿En qué país cruzan los peatones con ladrillos en las manos? La respuesta es Canadá, específicamente en la ciudad de Vancouver, donde una asociación ha ideado una campaña innovadora para que los peatones puedan cruzar la calle con seguridad.
Vision Zero Vancouver, una organización que busca transformar las ciudades en espacios seguros para todos aquellos que se trasladan a pie, ha creado una campaña que ha llamado la atención de los medios de comunicación y redes sociales.
El lema de esta nueva técnica es 'Be Seen, Grab a Brick', es decir, 'para ser visto, coja un ladrillo'. La organización ha colocado cestas con ladrillos en diferentes zonas de la ciudad para que los peatones crucen la calle con uno de estos bloques en la mano.
El objetivo principal es ser vistos con un ladrillo en la mano para que los conductores frenen el vehículo cediéndoles el 'testigo' en los pasos de cebra sin semáforos. Sin embargo, esta técnica no busca que lancen los ladrillos a los coches en caso de no dejarles pasar, sino que busca llamar la atención sobre la importancia de la seguridad vial.
Esta campaña busca concienciar a los conductores sobre la importancia de ceder el paso a los peatones en los pasos de cebra y reducir así el número de atropellos. Con esta iniciativa, Vancouver se convierte en un ejemplo a seguir para otras ciudades que buscan promover la seguridad vial.
Esperamos que esta campaña inspire a otras ciudades a implementar medidas innovadoras para proteger a los peatones y reducir los accidentes viales.
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